viernes, 29 de junio de 2007

Toro Salvaje


Jake La Motta:
Eras tú, Charley. Tú eras mi hermano. Deberías haber cuidado de mí un poco. Deberías haberme cuidado un poco en lugar de hacerme buscar el dinero rápido. Tú no lo entiendes. Podría haber sido un contrincante. Podría haber sido alguien en lugar de un holgazán, que es lo que soy. Vamos a afrontarlo. Fuiste tú, Charley. Fuiste tú, Charley..."

Título original: Raging Bull
Director: Martin Scorsese
Actores: Robert DeNiro, Joe Pesci, Cathy Moriarty
Año: 1980
Duración: 123 minutos (aproximadamente)
Trailer: http://mymovies.net/player/default.asp?filmid=2501&url=/film/fid2501/trailers/trid918/wm/high.asx

Intensa biografía del boxeador Jake La Motta, presentada por el dúo mágico de Martin Scorsese y Robert DeNiro (cuando aún desprendían magia, claro). La película muestra una caída en picado de un hombre violento e incontrolable que hace lo que puede por triunfar y, a la vez, dañarse a sí mismo.

En un delicado momento de su vida Scorsese decidió rodarla en blanco y negro, lo que acabó aportando más dramatismo y solemnidad a la obra. Con unos combates de boxeo de una crudeza y realidad nunca vistos antes en una pantalla de cine, sin olvidar que fue realizada gracias al espectacular éxito de Rocky, la violencia desplegada por La Motta en el ring no cesaba cuando se quitaba los guantes...

Pero no son los combates ni el triste drama que era la vida de La Motta ni la dirección de Scorsese lo más destacable del film, sino la interpretación de Robert DeNiro que le valió un Oscar (por aquellos días un Oscar aún significaba algo). Nariz rota, musculatura, gestos rudos, engordar 60 libras... Todo lo que hizo falta lo hizo DeNiro, demostrando la pasión que sentía por la película (fue de los que más le insistió a Scorsese para que la rodara).

También es meritoria la labor de los secundarios, encabezados por Joe Pesci y Cathy Moriarty, con los que el espectador puede sentir el hecho de que todo el que estuviera cerca de La Motta acababa sufriendo como si el hombre nunca supiese cómo bajarse del ring...

La historia de un perdedor condenado a caer por su propia mano, muy bien dirigida e interpretada por un director y un actor en estado de gracia.

jueves, 28 de junio de 2007

Doom Patrol


Cliff: No sé qué decir. Todo esto me parece una locura.
Caulder: Creía que te gustaban las locuras. Me dijiste que así mantienes la mente ocupada.
Cliff: No, no me quejo. Pero a veces me gustaría evitar un atraco a un banco o capturar a una mente criminal. Ya sabes, como los supertipos normales...
Caulder: ¡Tonterías, Cliff! Es esencial que dejemos tareas tan pusilánimes a los cretinos musculosos que disfrutan con ellas. Nuestro trabajo es importante.

Editorial: Planeta DeAgostini
PVP: 3,5 € cada uno.
Guión: Grant Morrison
Dibujo: Richard Case
Entintado: Varios

Finaliza este mes (en su número 20) la recopilación mensual de la Patrulla Condenada guionizada por Grant Morrison. No hay ninguna saga en concreto o número determinado en el que centrarse porque toda la obra es rara como ella sola. Desde los rallantes Hombres-Tijera hasta el extraño Hacedor de Velas, pasando por el inconmensurable Mr. Nadie o el ridículo pero poderoso Yankie Doodle, todos los números forman un viaje hacia ninguna parte. Un correcto Richard Case hace lo que puede por reflejar en las páginas los guiones paridos por la mente enferma del señor Morrison. Y menudos guiones...

La lucha de unos inadaptados contra la irracionalidad que intenta acabar con el mundo es una de las experiencias más fascinantes que he tenido el placer de leer. Cuando finaliza una saga acabas más mareado y desorientado que al final de una noche donde la absenta ha hecho estragos en tus neuronas, pero con la extraña sensación de que lo que te han contado tiene sentido, aunque no acabes de entenderlo. Es ese raro sentimiento lo que me fascina de estos cómics, lo que los separa de una fantasmada sin sentido (aunque muchos opinen que no es más que eso, una fantasmada sin sentido).

No se si es mi mente enferma o el exceso de alcohol en sangre, pero los personajes que están medio cómic diciendo cosas sin sentido se convierten, tras una segunda (o tercera) lectura , en auténticos profetas de pensamiento alternativo e ideología New Age. Y las aventuras bizarras en las que se meten los protagonistas, capaces de hacer enloquecer al más lúcido de ellos, se convierten en asombrosas realidades que nadie puede demostrar que no existan... Aunque tampoco se limitan estos cómics a mostrar tesis filosóficas ni psicoanálisis profundos, si hay que darse de ostias contra arquetipos del ser humano o manifestaciones físicas de los miedos más profundos del subconsciente, ahí van Robotman, Rebis y Crazy Jane para reventarlos. En definitiva, algo que nunca había visto en un cómic y que me temo no volveré a ver.

Posiblemente el trabajo más personal de Grant Morrison. Lo mejor es leerse los tres o cuatro primeros números y ver si te gusta o no (más que nada porque las cosas alcanzan niveles de delirio aún peores en cuanto se avanza en la numeración...). Es una de esas pocas obras en las que de verdad se puede aplicar eso de "puede gustarte o no, pero seguro que no te deja indiferente". A mi me gustó, sí, y no me dejó nada indiferente. Si pensabas que los números de Morrison de New X-Men eran raros, es porque no has visto lo que hizo con La Patrulla Condenada...

Psicosis


Norman: Bueno, es algo más que un pasatiempo. Un pasatiempo es matar el tiempo sin llenarlo.
Marion: ¿Y el suyo está vacío?
Norman: Verá, llevo los libros, cuido las habitaciones, la casa. Bueno, solo hago lo que mi madre me permite.
Marion: ¿No tiene usted amigos?
Norman: El mejor amigo para un muchacho es su madre. ¿ Usted no ha tenido un momento vacío en toda su vida?

Título original: Psycho
Director: Alfred Hitchcock
Actores: Anthony Perkins, Vera Miles, John Gavin, Martin Balsam, John McIntire, Janet Leigh
Año: 1960
Duración: 104 minutos (aproximadamente)
Trailer: http://www.movie-list.com/p/psycho1960.html

Espectacular muestra de la maestría de Alfred Hitchcock para enredar al pobre espectador. Rodada en glorioso blanco y negro, los primeros momentos de la película nos muestran el crimen que comete una persona normal y corriente, Marion Crane, para acabar con el misterio y la intriga que se inicia cuando la pobre mujer se para en el motel regentado por Norman Bates...

Como le gusta a Hitchcock: un comienzo tranquilo y pausado para acabar dando un vertiginoso giro de 180º y dejar al público sentado en la butaca. Llena de escenas ya míticas en la historia del cine (el apuñalamiento en la ducha, las zancadas de la madre con el cuchillo en la mano, los planos de la tenebrosa casa con la luz de la habitación encendida o el mismísimo final...) y con un tema demasiado explotado en la actualidad (el de psicópata bastante demente), le entran ganas a uno de poder viajar en el tiempo para ver la reacción de la gente inocente que fue en 1960 a ver esta película; hoy en día estamos insensibilizados por culpa de Freddys, Jasons, Myers o Saws, pero en 1960 nadie estaba preparado para la familia Bates...

Fue una de esas ocasiones en que se juntó todo: Hitchcock con ganas de asustar, una música inquietante (el propio Hitchcock decía que no sería lo mismo sin esa banda sonora), un Anthony Perkins actuando de manera soberbia (papel que marcaría el resto de su carrera, por cierto) y un público que ignoraba lo que iba a pasar...

Es una de esas películas que hay que ver, y además de verdad...

The Authority


Swift: ¿A cuánta gente crees que matamos?
Hawksmoor: ¿Cuánta gente habría muerto si no hubiésemos estado aquí? No es una gran respuesta, lo sé, pero es la mejor que tenemos. Hemos salvado más gente de la que hemos matado.

Editorial: Norma Cómics
PVP:
26 €
Fecha: Julio del 2006
Guión: Warren Ellis
Dibujo:
Bryan Hitch
Entintado:
Paul Neary

Muy buena (y oportuna, ya que Norma se quedó sin la mayoría de colecciones de DC) recopilación de los primeros 12 números de una colección que significa el primer soplo de aire fresco en el cómic de superhéroes después de muchos años de copias baratas: The Authority. Con un Warren Ellis resuelto a contarnos una carnicería tras otra y un Bryan Hitch que empieza a desmarcarse de sus "influencias" de Alan Davis, los héroes de este grupo están decididos a cambiar las cosas de verdad, aunque eso signifique situarse sobre los gobiernos establecidos. Invasión tras invasión vemos los esfuerzos de The Authority para salvar el mundo (a pesar de sí mismo). Repleto de violencia y chistes fáciles, el señor Ellis no deja pasar la oportunidad de criticar lo que es políticamente correcto hoy en día de una forma brillante. Y tampoco hay que olvidar el buen hacer de Bryan Hitch, que para muchos llega a superar a Alan Davis en estas páginas, con devastaciones a gran escala y unos enfoques cinematográficos espectaculares pero que a la vez permiten seguir la acción sin ninguna clase de distracción (a menos que te quedes contando los pedazos de Big Ben que salen volando o cosas así...).

Representa el cómic de superhéroes llevado al exceso: enfoque cinematográfico, exageraciones realizadas a propósito, destrucción masiva (de verdad) y espectacularidad por los cuatro costados. Resultó todo un éxito y una revolución (algunos lo comparan con el efecto que produjo en su tiempo Watchmen o el Dark Knight Returns) que no tardó mucho en ser copiada por títulos como Ultimates o (New) X-Men...

La edición de tapa dura se completa con unos cuantos bocetos e ilustraciones de Hitch y una breve biografía de sus autores. Si te perdiste la colección en grapa, no deberías dejar pasar esta oportunidad...